Para muchos jóvenes estudiantes cuando llega el momento de rendir los exámenes durante su etapa de estudios en el colegio, puede ser un momento muy agobiante, que puede causar estrés e incluso insomnio en algunos casos, sobretodo para aquellos alumnos que se sienten presionados o obtener sí o sí muy buenas calificaciones.

Ciertamente prepararse para rendir exámenes en la escuela no es una situación tan agradable para muchos alumnos y es muy necesario que cada estudiante de forma voluntaria y consciente se de un tiempo a repasar sus lecciones, así como resolver problemas a modo de ejercicios como por ejemplo en caso del curso de matemáticas o realizar resúmenes o incluso algunos alumnos desarrollen algún método para lograr memorizar mejor aquellos temas que le resulten más significativos o que sean preguntas clave en los exámenes.

Para algunos alumnos prepararse para rendir un examen puede ser ocasión de mucha angustia y estrés.

Es importante una adecuada preparación para lograr obtener buenas calificaciones al rendir los exámenes, lo cual implica hacerse horarios, usar métodos de estudio, también es importante que el alumno deja un lado otras actividades que puedan distraerlo como ver televisión o jugar vídeo-juegos en su celular; aunque es también importante tomar descansos.

A continuación conoceremos algunas pautas que serán muy útiles a tomar en cuenta, para estos momentos de preparación académica:

1- Respetar las horas de sueño:

Según un estudio realizado en la Universidad de Brigham Young, dormir bien favorece la memoria y el aprendizaje. Por tanto, es muy aconsejable que el estudiante tenga un horario regular y no se salte horas de sueño.

Es importante dormir las horas adecuadas para que el cuerpo pueda responder bien al momento de repasar las lecciones.

2- Alimentarse de forma saludable:

Al menos cinco veces al día, es importante nutrirse con alimentos ricos en antioxidantes (frutas, verduras) buenas proteínas (carnes magras, legumbres y huevo), carbohidratos (arroz, cereales, patatas) y ácidos grasos omega 3 (pescados azules, aceites vegetales, frutos secos).Y, es esencial, beber agua. Si todo esto logra su fin, las bebidas energéticas y los suplementos son innecesarios.

Alimentarse sanamente es esencial para un correcto funcionamiento del organismo, lo cual es importante para estudiar de manera óptima.

3- Tener un lugar exclusivo de estudio:

Es muy conveniente estudiar siempre en el mismo lugar, logrando que este se mantenga limpio, ordenado, iluminado con luz natural si es posible, a una temperatura adecuada y libre de distracciones.

Es recomendable tener una zona preparada para poder estudiar con comodidad.

4- Higiene postural:

Es importante sentarse bien a la mesa de estudio, lo cual favorecerá la concentración así como evitará dolores de espalda.

Lograr una buena postura al momento de estudiar será de mucho beneficio.

5- Planificación:

Hacer uso de un calendario será muy útil para visualizar el tiempo versus la cantidad de estudio, pruebas y proyectos que se deban entregar. Siempre es bueno planificar el estudio fraccionado con antelación (una semana, por ejemplo). También es positivo incluir en él las horas de tiempo libre, actividades extra-escolares y deportivas que pueda realizar el estudiando. Ya que no se trata de que este deje de hacerlas sino que aprenda a organizar su tiempo.

Tener un calendario y tener un tiempo planificado para estudiar, es un forma muy eficiente de aprovechar las horas del día.

6- El tiempo de estudio:

Se debe tener en cuenta que la concentración empieza a decaer a partir de los 30 o 40 minutos de estudio. De forma general, entre los 3 y los 6 años, conviene empezar con tareas de 10-15 minutos para que el pequeño se vaya habituándose a trabajar; 30 minutos a los 8 años; 45 minutos a los 10 años, y periodos de una hora a partir de los 12 años.

Según la edad del niño se debe tomar en cuenta un lapso de tiempo de estudio para logre concentrarse y evitar la fatiga.

7- La importancia de hacer una pausa:

Se debe tomar en cuenta que es nada productivo que los niños estudien todo el día sin parar. Nuria Vallejo recomienda el método Pomodoro, una técnica creada por el italiano Francesco Cirillo que consiste en alternar el tiempo de estudio con el de descanso. Así se deben realizar periodos de estudio de 25 minutos (un “pomodoro”), sin distracciones. Luego de ese tiempo, una pausa de 5 minutos y luego otros 25 minutos estudiando. Así, hasta lograr completar cuatro “pomodoros”, tras los cuales se puede tomar una pausa de 15 minutos y repetir el ciclo otra vez.

Foto Premium | Feliz niña asiática niño acostado en la mesa de madera con cámara

Es importante tomarse descanso incluso cuando se estudia, ya que si uno es forzado a estudiar sin descanso al final será un desperdicio de tiempo.

8- Deberes sí o no:

Este es ciertamente uno de los temas más controvertidos de la vida escolar. Según un estudio de la universidad de Oviedo, para los mayores de 11 años una hora al día de deberes es suficiente para reforzar lo que hayan aprendido en clase. Para los más pequeños la investigación recomienda multiplicar el curso en el que están por 10 minutos. Vallejo añade que “en primaria lo ideal sería iniciar los deberes en el colegio, destinando un tiempo para terminarlos allí y proseguir en casa con lo que quede. En secundaria aunque no traiga tareas para casa, los adolescentes deberían invertir tiempo en repasar las asignaturas, leer los apuntes, hacer resúmenes de lo aprendido en el día”.